La diabetes es una enfermedad crónica que no se puede curar, pero sí controlar adquiriendo hábitos de vida saludable: adecuada nutrición, ejercicio y en ocasiones, medicamentos.
Alimentación saludable
El consumo de ciertos alimentos puede generar en el paciente diabético un incremento de los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre.
Por esta razón, identificar la cantidad que se ingiere en cada comida ayuda a controlar dichos niveles, para que estos estén dentro de los límites deseados. Siga las recomendaciones:
Establezca sus comidas del día: desayuno, media mañana, almuerzo, merienda y cena; según indicación de Nutrición.
Coma despacio y mastique bien cada bocado.
Consumir de 3 a 5 porciones entre frutas y verduras al día.
Preferir cereales de granos enteros y harinas integrales: quínoa, cebada, avena, maíz).
Actividad física y ejercicio
Revisar las etiquetas de información nutricional en los productos, enfocándose en los gramos de carbohidratos y considerando las medidas en que vienen representadas. Recuerde
tratar de consumir alimentos que no contengan azúcar.
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