Autor: Paola Marsela Pérez, MD. Infectóloga Pediatra
INTRODUCCIÓN
Los virus del papiloma humano (VPH) ocasionan la infección de trasmisión sexual más frecuente que existe, una infección que afecta en especial a los jóvenes, tanto mujeres como hombres. Se estima que el 80% de las personas sexualmente activas contraerán el VPH alguna vez en la vida, con mayor frecuencia en los primeros diez años después del inicio de la vida sexual, y el riesgo se relaciona directamente con el número de parejas y contactos sexuales.
Estos virus pertenecen a una familia en la que hay más de 200 genotipos distintos; de ellos unos se asocian con desarrollo de cáncer y otros no. Por esta razón algunos se clasifican como de alto riesgo oncogénico (capacidad de producir cáncer) y otros de bajo riesgo.
Los de bajo riesgo, si bien no se asocian a cáncer o lo hacen con una baja probabilidad, producen otras lesiones que son incómodas y de muy difícil manejo, pues no se cuenta con tratamientos específicos para controlarlas. Algunas de ellas son las verrugas, que pueden aparecer en cualquier sitio del cuerpo, incluyendo los genitales.