Es una enfermedad crónica del metabolismo que no se puede curar, pero sí controlar. Ocurre cuando el cuerpo no produce suficiente insulina o no puede usarla de forma adecuada, generando un aumento de los niveles de azúcar en la sangre.
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Existen medicamentos inyectables diferentes a la insulina que tienen como objetivo controlar la diabetes y la obesidad. Es importante que tanto el paciente como su cuidador aprendan cómo y dónde se debe aplicar el medicamento.
Aplicación de la insulina: ver video
Medicamentos inyectables diferentes a la insulina: ver video
El consumo de carbohidratos puede generar un incremento de los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre. Por esta razón, identificar la cantidad que se ingiere en cada comida ayuda a controlar dichos niveles, para que estos estén dentro de los límites deseados.
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Alimentación: ver video
Las personas con diabetes tienen mayor riesgo de presentar enfermedades en la encía y pérdida de los dientes, debido a la predisposición de sequedad en la boca, la lenta cicatrización de las heridas y la alteración en las defensas.
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Salud oral en el paciente con diabetes:
Realizar ejercicio con regularidad aumenta la sensibilidad a la insulina, haciéndola más eficiente y permitiendo el paso de más glucosa hacia las células.
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